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Monday, March 31, 2025

Momento de agradecimiento

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Revista Latina “EL lugar donde descubrimos muchas culturas, pero el orgullo de pertenecer a cada una nos une”. Organización que promueve actividades multiculturales, educativas, sociales y comerciales para los mexicanos y latinoamericanos radicados en Carolina del Norte, USA. A lo largo de los años, ha llevado a cabo diversas iniciativas y proyectos para promover la cultura, el arte y los negocios de la comunidad mexicana y latinoamericana en la región. Entre estas actividades destacan festivales culturales, publicaciones de libros, tienda en línea para artistas latinos y eventos virtuales. Revista Latina se ha convertido en un referente para los inmigrantes mexicanos y latinoamericanos en Carolina del Norte, brindándoles orientación, información y conexiones para prosperar en su nueva vida en el extranjero

Momento de agradecimiento
(Lanzamiento de ‘La sociedad de la mentira’)

Aeroamigos en celebración
Aeroamigos en celebración

Por Jorge Eduardo Bustos*

Bienvenidos, mis estimados Aeroamigos, familiares, allegados y demás asistentes a este bonito evento cuando celebramos por partida doble y con inmarcesible júbilo el cuadragésimo séptimo aniversario de nuestro ingreso a la Fuerza Aérea Colombiana y ser referentes, de alguna manera, de varios personajes de la novela ‘La sociedad de la mentira’, escrita por uno de los presentes y cuyo lanzamiento es hoy y aquí, con nosotros como protagonistas.
Este 27 de marzo de 2025 cumplimos 47 años de haber llegado a la amada Escuela de Suboficiales de la Fuerza Aérea Colombiana… ¡’así se va a las alturas’!
Les agradecemos, en primer lugar, a nuestros anfitriones la señora Maribel Lombo y a su esposo Luis Alberto Arévalo, ‘cursito’ como dice Fernando Cañaveral, quienes una vez más nos abren las puertas de su acogedor hogar en este apacible lugar en Tabio, Cundinamarca, para hacer este encuentro anual y podernos exteriorizar nuestra gratitud y sentimientos fraternos.
Es de resaltar y corresponder, desde luego, la presencia y el apoyo que todos los integrantes de nuestras familias nos han brindado en el arduo camino recorrido hasta ahora, y, seguramente, de lo que falta. Sin este invaluable soporte difícilmente habríamos llegado hasta donde estamos y lograr lo conseguido. Amados familiares, los presentes, los ausentes y los que partieron a lontananza, ustedes han sido, son y seguirán siendo los pilares más significativos de nuestras existencias en ese ir y venir de allá para acá y acullá, ténganlo por seguro.
Palabras apartes nos merecen en este momento nuestros idolatrados viejos: papás, mamás, abuelos y abuelas; algunos todavía nos confortan con su presencia y a quienes les debemos nuestro apoyo y compañía irrestrictos. Otros, quizá la mayoría, los que se nos adelantaron, lo siguen haciendo con su presencia etérea que fortalece y guía nuestros cansados pasos. Para unos y otros, incluidas aquí nuestras amadas esposas, así como los hermanos, primos, tíos, hijos y nietos, nuestros respetos, agradecimientos y admiración por siempre. No existe moneda ni palabra que pueda pagar y exaltar el precio de su esfuerzo, dedicación, confianza, apoyo y entrega para con nosotros.
Aeroamigos, es momento de reflexión y de agradecer, también, ¡desde luego!, el llegar a estas instancias; a estas elevadas y complejas, por no decir frágiles ramas del árbol de la vida por las que ahora merodeamos con algo de precaución, evidente riesgo y atento cuidado; como nos lo advierten ellas, nuestros grandes amores, así como nuestros hijos y nietos; unos y otros a veces con impaciencia o apretada tolerancia frente a nuestros arrebatos y chocheras. Esto último, quizá porque, así lo neguemos o intentemos esconder, se nos dificulta ver, escuchar bien y discernir con rapidez como lo hicimos hasta hace algunos años.

Aeroamigos por siempre
Aeroamigos por siempre

Pese a todo, es un privilegio haber escalado y alcanzado estas calendas, no solo acompañados de los nuestros, sino, de alguna manera, de cada uno de ustedes, queridos Aeroamigos. Es admirable y plausible el hecho de permanecer todavía juntos. Encomiable que nos mantengamos unidos y podamos disfrutar de un aniversario más con unos cuantos integrantes de aquella muchachada alborotada que coincidió en marzo del 78 en nuestra bonita alma máter: ¡ESUFA!, allá, en la fría Madrid, solariego pueblo cundinamarqués del jamás olvido.

ESUFA, alma máter
ESUFA, alma máter

¡Qué emoción me crispó el alma cuando Toñito Acero, a la distancia, nos compartió en estos días los éxitos musicales de hace 47 años! ¿Los recuerdan?: Rasputín, YCA y I Will Survive. Estas y otras canciones como la de Pedro Navaja retumban en mis oídos y me parece estarlas escuchando como lo hicimos por aquellos gloriosos años. Evocación que me arruga el alma e incita las ganas de bailarlas y cantarlas como en aquel ayer imperecedero. ¿Recuerdan algunos de sus versos más pegajosos y quiénes las interpretaban? Al final, con otras preguntas que haré, quizá haya un premio sorpresa para quien las responda de manera acertada. Si hay más de uno lo rifaremos entre estos. Por esto, «¡Oído a la caja!», como nos decía el sargento Cruz… ¡el del machete!
Es admirable, también, que, tras colgar el uniforme, dejar de formar y dar parte en relación sigamos unidos, así sea mediante las redes y el grupo de WhatsApp que nos mantiene en contacto; aunque no todos escribamos, contestemos o echemos discursos largos y dicientes como los de nuestro sempiterno presidente Eduardo Yepes. Sin embargo, sabemos que todos los que hacemos parte de este grupo leemos y escuchamos de vez en cuando lo que publicamos. Lo hacemos para estar al corriente del chisme que nos mantiene al tanto, alegra el rato y nos evoca momentos gratos… También, para recibir esos baldados de agua fría cuando alguien se enferma, es hospitalizado o se despide temporalmente para esperarnos donde lo hacen Varguitas, Gerena, Alzate, López y otros tantos que también compartieron con nosotros circunstancias inéditas como la vez que, a falta de cubiertos, nos tocó usar la cédula como cuchara para comer. ¡Cómo olvidar aquellos fatigosos terrenos que hicimos en Barro Blanco o la subida al trote a la loma de la piedra…! Disculpen estas lágrimas y palabras entrecortadas con sabor y olor a viejo.
Por todo lo anterior y muchas otras cosas que dejo en el tintero para evitar emular a Eduardo cuando nos envía sus mensajes más que explícitos, hago un sentido llamado para que compartamos un poco más la vida, ahora que podemos y aún estamos en condiciones. Les reitero: reunámonos más seguido, so pretexto de cualquier cosa, así sea solo para darnos un abrazo, tomarnos un tinto en un Juan Valdez o donde sea; no esperemos para hacerlo en un hospital o, más triste aún, ¡en una sala de velación!

Enciso, Triviño y Bustos
Enciso, Triviño y Bustos

Ahora quiero hacer en nombre de los Aeroamigos un reconocimiento y exaltación especial para nuestro escritor Wilson Rogelio Enciso. Sus novelas, relatos y escritos, aunque de ficción social, como los rotula, llevados en una forma mágico-literaria plasman la realidad e idiosincrasia de nuestro país y, en especial, en su más reciente obra publicada: “La sociedad de la mentira”. Sé que en esta y en otras algunos de sus personajes podrían ser creaciones a imagen y semejanza nuestra o caracterizar de manera trasfigurada a varios de nosotros: sus ‘Aeroamigos del alma y letras’, como a veces Enciso publica en redes y lo cuenta en sus amenas entrevistas.
Los invito a que todos adquirieran, lean y difundan sus obras entre sus familiares, amigos y entorno social. Obras que son nuestras y en las cuales hacemos parte, estamos presentes, de una u otra manera, ¡les aseguro! Letras impresas y empastadas que, en unos años, cuando con seguridad ya no estemos por aquí, nos mantendrán vigentes y literariamente vivos a través de sus controversiales personajes de ficción social. No más échenle una ojeada a esta primera Compilación de ‘Relatos Subcontinentales Imperfectos’ y a la que viene en camino. Les aseguro que les arrugará el alma.

Compilación número uno de relatos
Compilación número uno de relatos

Obras disponibles en formato impreso y digital en las plataformas de Amazon. También, en tapa blanda, en Autoreseditores y en wrenciso.com, con despachos a donde quiera sea que usted esté, quiera o necesite.
¿Cuántos de nosotros somos citados en esta compilación de ‘Relatos subcontinentales imperfectos’? Por ejemplo, en el relato ‘La Tiendecita’, ¡la de don Agustín!, aunque aquí tenga otro nombre. ¿Saben a qué tienda se refiere Enciso y cómo es el nombre que ahí le puso a don Agustín?
Los invito a que identifiquen quiénes podrían ser, entre otros, los siguientes personajes de su nueva novela titulada ‘La sociedad de la mentira’: El aguerrido agente especial Nicolás Tibaduiza Martínez, aunque ya no ejerza nada parecido y a lo que se dedica ahora dé muestras de estar de aquello arrepentido; el doctor Ismael Paz Villarreal a quien casi todos consultamos cuando se nos enreda la piola o alguien nos la enreda; Fernando Arismendi el más fortacho y fornido de los amigos; Edgardo al que le decimos nuestro líder y quien en estas páginas intenta remendar las alas de Ícaro con hueso duro; Adalberto al que operaron varias veces en el Hospital Nacional Central y quien también es protagonista en ‘Relatos subcontinentales imperfectos’… y a tantos más personajes y lugares difractados que aparecen en esta y en al menos siete de sus obras de ficción social y en más de quince relatos de los que publica cada mes en Revista Latina NC, Estados Unidos, Italia, Argentina, Panamá y en sus redes.
Insisto, algunos de nosotros aparecemos o nos asomamos en al menos siete de sus novelas y en las dos compilaciones de relatos subcontinentales.

Aeroamigos de toda una vida
Aeroamigos por siempre

¡Sí!, los Aeroamigos somos testigos de excepción de buena parte de su novata inspiración de aquellos años ochenta, noventa y primeras décadas del presente siglo.
Además, somos protagonistas, tanto en siete de sus novelas, tal vez por aquello del número siete, como le decíamos, ¿se acuerdan por qué?, como en sus compilaciones de relatos subcontinentales y narraciones románticas… les aseguro sin temor a equivocarme.
Solo nosotros, sus compañeros de curso, sabemos de dónde Enciso sacó gran parte de tantas historias y personajes tan cercanos o al menos parecidos a los de esa alborotada muchachada de aquel marzo del 78, ¡cuarentaisiete años hace, aunque nos parezca que eso solo fue ayer!
Para los presentes, muchas gracias por su participación y asistencia; para los que por cualquier motivo no pudieron venir, sabemos que están con nosotros, donde quiera sea, así como nosotros con ellos, incluidos los que se nos adelantaron y partieron a lontananza”. Como le pasó a nuestro querido, jamás olvidado y siempre bien ponderado ‘Grillo’. Uno de los, al parecer, protagonistas de esta novela: ‘La sociedad de la mentira’. ¿Saben con cuál nombre Enciso habría inmortalizado aquí a Eliberto Gerena, su más cercano amigo y compinche de aspiraciones literarias por allá en los ochenta cuando lo acompañó a la editorial la Oveja Negra a llevar su primer manuscrito?
Ahora, por favor, vamos a disfrutar de una tarde de reencuentro y remembranzas tras el deli¡Sí!, los Aeroamigos somos testigos de excepción de buena parte de su novata inspiración de aquellos años ochenta, noventa y primeras décadas del presente siglo.
Además, somos protagonistas, tanto en siete de sus novelas, tal vez por aquello del número siete, como le decíamos, ¿se acuerdan por qué?, como en sus compilaciones de relatos subcontinentales y narraciones románticas… les aseguro sin temor a equivocarme.
Solo nosotros, sus compañeros de curso, sabemos de dónde Enciso sacó gran parte de tantas historias y personajes tan cercanos o al menos parecidos a los de esa alborotada muchachada de aquel marzo del 78, ¡cuarentaisiete años hace, aunque nos parezca que eso solo fue ayer!
Para los presentes, muchas gracias por su participación y asistencia; para los que por cualquier motivo no pudieron venir, sabemos que están con nosotros, donde quiera sea, así como nosotros con ellos, incluidos los que se nos adelantaron y partieron a lontananza”. Como le pasó a nuestro querido, jamás olvidado y siempre bien ponderado ‘Grillo’. Uno de los, al parecer, protagonistas de esta novela: ‘La sociedad de la mentira’. ¿Saben con cuál nombre Enciso habría inmortalizado aquí a Eliberto Gerena, su más cercano amigo y compinche de aspiraciones literarias por allá en los ochenta cuando lo acompañó a la editorial la Oveja Negra a llevar su primer manuscrito?
Ahora, por favor, vamos a disfrutar de una tarde de reencuentro y remembranzas tras el delicioso almuerzo que nos aguarda para conmemorar nuestro cuadragésimo séptimo aniversario institucional y hacer el lanzamiento internacional de la novela número once que publica Wilson Rogelio Enciso: ‘La sociedad de la mentira’, en la cual, así como en al menos otras siete y en varias de sus compilaciones de relatos y narraciones, insisto, algo más que familiar podríamos toparnos por ahí, nosotros y sus lectores alrededor del mundo. También haremos la rifa que les anuncié. Tengan listas sus respuestas.

cioso almuerzo que nos aguarda para conmemorar nuestro cuadragésimo séptimo aniversario institucional y hacer el lanzamiento internacional de la novela número once que publica Wilson Rogelio Enciso: ‘La sociedad de la mentira’, en la cual, así como en al menos otras siete y en varias de sus compilaciones de relatos y narraciones, insisto, algo más que familiar podríamos toparnos por ahí, nosotros y sus lectores alrededor del mundo. También haremos la rifa que les anuncié. Tengan listas sus respuestas.

Gracias, abrazos y buen provecho.

*Bustos, Jorge Eduardo, técnico electrónico en FAC-ESUFA, especialista en comunicaciones aeronáuticas en la IAFFA, ingeniero de vuelo, piloto, licencia de la Federal Aviation Administration de la universidad de Embry Riddley, Daytona, USA, con 19.800 horas de vuelo y aún al servicio de la aviación. Además, persona humanitaria en todos los ámbitos de la vida y quien cree que dar es recibir.

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