El lenguaje universal de la música llena los vacíos más emocionales del silencio. Sin palabras, expresa todo lo que a veces ellas no pueden transmitir, se adentra en el alma, dejando siempre una huella imborrable en el corazón. Solo ella puede reunir y abrazar diferentes culturas en un mismo sentimiento. Es pura y mágica. Sensible y espiritual. Ya decía Aarón Copland, compositor estadounidense: Detener el flujo de la música sería como detener el tiempo en sí mismo increíble e inconcebible.
Hace pocos meses, tuve la oportunidad de asistir a un gran evento donde Gabriel Moreno recitaba algunos de sus versos, y una vez más, hacía partícipe a un público devoto y entregado, de su gran talento como cantautor, deleitándonos con muchas de sus magníficas composiciones.
El poema propone la danza como tiempo y renovación del ser; la danza como lenguaje y misterio de los signos y las palabras para ganar nuevos sonidos y ritmos; la danza como el despertar de los sentidos a la vida; la danza, cuyo valor es la tierra, la naturaleza, la vida, el amor y la poesía…
Dos fechas específicas quedan grabadas en el recinto que guarda su morada (1928-2023), este dato, permite calcular los años vividos, distando de poder vislumbrar la siembra y cosecha que se fue gestando al paso de más de nueve décadas de existencia...
La música y la poesía van a la par, aunque se manifiestan en distintas dimensiones. En ambas disciplinas el mismo ritmo de la palabra va reconstruyendo el origen. ¿Cómo descubrimos lo que nos dice esa diminuta, pero sustancial notación en el pentagrama y/o cuaderno de escritura? Es totalmente un misterio, lo que más importa es atreverse a escribir, cantar o crear. La intuición es la que marca la cadencia de los acontecimientos, la pasión verdadera y la entrega hacia lo que uno ama hacer. Al final de cuentas andamos y desandamos el mismo ritmo que nos construye para ser diferentes del ayer y cimentar otros caminos en el presente.
Tiempos para inquietarnos, tiempos de pandemia y de angustias. Es en esos momentos cuando la palabra, la música se convierte en escondite y escudo, palabras de esperanza.
El día 14 de febrero, día del AMOR universal se estrenará, mundialmente, en las principales plataformas una canción compuesta por el gran Alberto Reina, cubano, afincado en Ecuador y que ha decidido producir “Nada está perdido”.
He tenido la suerte de poder entrevistar a Eduardo Murillo, uno de los más prestigiosos productores musicales no sólo de Ecuador, sino de reconocido prestigio internacional dentro de Latinoamérica y fuera de ella. Lleva cientos de producciones discográficas desde que comenzó.
Me enfoqué en escribir algo sobre lo que vivíamos quería expresar un poco de mi inconformidad hacia las personas que no seguían las indicaciones y las peripecias que ocurrían en esa "nueva normalidad". De ahí surge Hijo del Maiz.El material cuenta con dos canciones: Vivir sin tí e Hijo del Maiz -cabe resaltar que en la expresión no se utiliza la tilde y suena más como: iiijo del maiz o jijo del maiz. Dicho término en ocasiones se utiliza en México para denostar una sensación de malestar o preocupación -según el contexto-.
Hoy, el gobernador Roy Cooper firmó un estado de emergencia en preparación para los impactos del posible ciclón tropical dieciséis. "Es importante que los habitantes de Carolina del Norte se preparen para los posibles impactos de la tormenta que se avecina", dijo el gobernador Cooper. "La trayectoria de la tormenta ha sido difícil de predecir y queremos asegurarnos de que los agricultores, los socorristas y los equipos de servicios públicos tengan las herramientas necesarias para prepararse para condiciones climáticas severas".