Las enfermedades o trastornos mentales representan el porcentaje más alto de problemas de salud en Estados Unidos. Según datos de la Oficina de Salud de las Minorías, el suicidio es la segunda causa de muerte de los hispanos entre 15 a 34 años de edad.
El estado de emergencia declarado a nivel nacional a partir de la COVID-19, generó políticas de salud pública que buscaban proteger a los ciudadanos ante la contingencia sanitaria. Entre las leyes se encontraba, la cobertura de Medicaid continua, que les garantizaba a aquellos beneficiarios de Medicaid, una cobertura sin interrupción, sin redeterminación anual en base a cambios en el núcleo familiar o en los ingresos.