Cuando la llama de la fe arde hacemos
de la vida un cuento de hadas
las barreras superamos cada tarde
a la meta llegamos aladas
cuando la llama de la fe arde
hacemos cerraduras de madera de
ser artista hacemos alarde
danzamos la vida en la pradera
sin cesar nos fortalecemos
camino al sueño preciado
amables nos hacemos
censuramos lo privado
nos enamoramos con soltura
nos salvamos de la impotencia
las alas crecen sin costura
vivimos con vehemencia
cuando la llama de la fe arde
florecen dones, cualidades
hacen que el plan no se retarde
nos conquistamos cual Pléyades
cuando la llama de la fe arde
avanzamos hacia el sueño floreciente
cambiamos el sistema, el clima, al cobarde
para la generación adolescente
tomamos estrellas cual flores
no hay nada que del sol te guarde
resucitan los colores
¡cuando la llama de la fe arde!
Traducciones al español por María Del Castillo Sucerquia