En este mundo de locos, hemos pasado de sentirnos orgullosas y destacar los logros de la mujer, a sentir vergüenza por algunas actuaciones y determinadas incongruencias de unas pocas que forman demasiado ruido. Pero no perdamos el norte, ni hacia un lado ni hacia el otro, está claro que la mujer ha sido durante muchos años silenciada, anulada y maltratada socialmente, y gracias al grito de muchas a las que llamaron locas, se ha reconocido que, actualmente, aún vivimos en un mundo lleno de hipocresía en el que se le atribuyen a la mujer tareas como la casa o cuidar de los hijos...
El proceso en sí, de juntar una palabra con otra para estructurar un pensamiento de manera que sea comunicable, no debería de doler. El arte de escribir es un placer y por eso quienes escribimos andamos siempre en esto, ya sea escribiendo propiamente tal o pensando sobre qué escribir o recordando lo que ya escribimos. Es un placer y, en consecuencia, desarrolla una necesidad, una pulsión, una forma de enamoramiento...
De la inspiración se habla hasta el cansancio. Que si es un flechazo, como el de Cupido. Que si es un destello, unas musas, unos magos, un milagro, una puerta, un ancestro, un espíritu travieso que, de repente, nos abre el camino de un hermoso texto o nos regala una llave o un mapa o una brújula hacia un asunto que se presta para nuestras aventuras literarias. En el contexto de escribir nuestra historia esa inspiración nos diría por dónde empezar o qué personajes son claves o qué lugares recrear o qué tesoro hay en nuestra memoria que sirva de cimiento para la narrativa...
Mercedes Margarita Cadena Olguín es una escritora y narradora oral que cuenta historias para niños, niñas y adolescentes. En esta ocasión, platicó sobre su libro De renacuajos a ranas, una obra con enfoque ambiental que concientiza a través de múltiples historias.
Hace más de un año que no publico un artículo y en aquella ocasión fue un pequeño relato que, junto a otros tres anteriores, conformaban un cuento breve. Se podían leer de forma independiente, como mis novelas, aunque estas son una especie de diarios-epistolarios, nada de cuentos. No solo apareció, aquel “artículo”, en Diario Alhaurín (Alhaurín de la Torre, Málaga), 103 Málaga o Revista Mimeógrafo (Chiapas, México), sino que también lo hizo en Revista Kamadeva, especializada en textos románticos.
El arte es ese lugar en donde se hermanan y estrechan lazos y emociones y que mejor que la combinación perfecta de música, voz y poesía. Este es el caso de la canción “Yo vengo” basado en un poema de la prolífica artista y poeta costarricense Ligia Calderón Valerín y la música de John Adam Mascarenhas y Teresa Mascarenhas, una canción que logra unir a los corazones de aquellos que la escuchan.
Ávidos por pulir un relato procedemos a sustituir los lugares comunes por otras formas más creativas y personales de decir las cosas. Ahora bien, es necesario ponerse a pensar (además de ser original) en qué realmente afecta esa “frase hecha” o lugar común. A veces es porque resta sinceridad donde el asunto de que nos crean es esencial, como en un testimonio o en una autobiografía, porque ahí la especificidad es el mayor aporte...
Juan Fuentefria es un actor y modelo profesional, capaz de seducir a la cámara como también desafiarla. Gracias a su magnetismo innato consigue derribar barreras. Carismático, Autoexigente con su trabajo, de belleza desbordante...pero sobre todo, puede presumir de ser un actor versátil y muy responsable con sus papeles.
El estado de emergencia declarado a nivel nacional a partir de la COVID-19, generó políticas de salud pública que buscaban proteger a los ciudadanos ante la contingencia sanitaria. Entre las leyes se encontraba, la cobertura de Medicaid continua, que les garantizaba a aquellos beneficiarios de Medicaid, una cobertura sin interrupción, sin redeterminación anual en base a cambios en el núcleo familiar o en los ingresos.