Desde cuando el peso de sus calendas se les convirtió en la mejor de sus galas; que hasta remplazó el esfuerzo de sus palabras y caricias, ahora incómodas, obsoletas y consideradas necedades por quienes orientaron sus vidas con estas; cada vez que tienen oportunidad… incluso, cuando no, so cualquier pretexto se escapan para ir al centro comercial cercano.