Me encanta Disney, pero, sobre todo, me gusta su capacidad para adaptarse a los nuevos tiempos, su capacidad para saber lo que desea ver el público.
Disney se ha adaptado a un mundo en el que las mujeres no somos simples damiselas en apuros, un mundo donde no necesitamos a los príncipes para que nos salven, ni una corona para ser princesas, porque ya no nos sentimos princesas, nos sentimos reinas.
El estado de emergencia declarado a nivel nacional a partir de la COVID-19, generó políticas de salud pública que buscaban proteger a los ciudadanos ante la contingencia sanitaria. Entre las leyes se encontraba, la cobertura de Medicaid continua, que les garantizaba a aquellos beneficiarios de Medicaid, una cobertura sin interrupción, sin redeterminación anual en base a cambios en el núcleo familiar o en los ingresos.