Una nueva herramienta creada por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Carolina del Norte que mapea la vulnerabilidad social y las tasas de vacunación por tramo censal ha ayudado a los proveedores de vacunas de Carolina del Norte a aumentar las vacunas en un 50 por ciento en 89 comunidades desatendidas.
El estado de emergencia declarado a nivel nacional a partir de la COVID-19, generó políticas de salud pública que buscaban proteger a los ciudadanos ante la contingencia sanitaria. Entre las leyes se encontraba, la cobertura de Medicaid continua, que les garantizaba a aquellos beneficiarios de Medicaid, una cobertura sin interrupción, sin redeterminación anual en base a cambios en el núcleo familiar o en los ingresos.