Hoy he comprendido que el mundo me parece feo. Yo no soy como esos filósofos o pensadores que se sentaban y decían “voy a pensar en este tema”, quizás por eso yo no soy filósofa y nunca llegaré a ser famosa por mis teorías. Ellos trabajaban en sus pensamientos, a mí me los muestra el universo, me los susurra una hermosa musa y me ilumina la belleza de una todopoderosa Diosa.
El retrato de Dorian Gray es de esas novelas que siempre he querido leer pero el destino nunca me la ha puesto en mis manos. Todos conocemos básicamente la historia, ya que se trata de una novela de 1890 escrita por Oscar Wilde.
Como colombiano es satisfactorio y un gran placer escribir en par de líneas sobre el maravilloso libro: ‘HISTORIA SECRETA DE LOS AZTECAS’, entre otras razones, por algunas que sustanciaré, sin sustento científico alguno (menos la última), producto de la mera escucha y la visualización literaria a lo largo de mi vida.