13 de abril de 2021. Wake County Salud Pública está pausando temporalmente las vacunas de Johnson & Johnson (Janssen) siguiendo la orientación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la Administración de Alimentos y Medicamentos, y el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Carolina del Norte.
Esta pausa no ralentizará los esfuerzos para #VaccinateWake. Wake County Salud Pública sólo tenía unas pocas clínicas J&J confirmadas en la comunidad para la próxima semana. Esas clínicas cambiarán a las dosis de Moderna para asegurar que los titulares de las citas puedan mantener sus ranuras y obtener vacunas para protegerlos de COVID-19.
Wake County tiene 7.902 dosis de J&J sin utilizar y las ha almacenado hasta que se publiquen nuevas directrices.
“Nuestro programa se diseñó intencionadamente para pivotar con rapidez en función del suministro de vacunas, por lo que esta pausa no tendrá un impacto significativo en nuestra capacidad para administrar las vacunas a los que tienen plazas en nuestra lista de espera”, dijo Ryan Jury, director de la rama de vacunación masiva de Wake County. “El anuncio de hoy es una garantía más de que la seguridad de las vacunas es una prioridad a todos los niveles, y que se ponen en marcha medidas inmediatamente cuando se detecta incluso un pequeño porcentaje o una incidencia rara”.
Para los que ya han recibido la vacuna J&J, los CDC dicen que el riesgo de coágulos peligrosos es “muy bajo”. Los CDC aconsejan que cualquier persona que haya recibido la vacuna J&J y experimente síntomas como fuertes dolores de cabeza, dolor abdominal intenso, dolor en las piernas o dificultad para respirar en las tres semanas siguientes a su vacunación, se ponga en contacto con su proveedor de atención médica.
