Raleigh.– Los nuevos descubrimientos que surgen cada día sobre las formas de contagio del coronavirus COVID-19, está haciendo que las autoridades de salud en el mundo también adapten sus recomendaciones para controlar la propagación de la enfermedad y evitar que más muertes ocurran.
Es así como desde hace unos días, desde la Casa Blanca el presidente Donald Trump hizo un llamado para que todas personas usen mascarillas de tela, aún si no tienen síntomas. Aunque dijo que él no las usaria.
“Según estudios recientes, sabemos que la transmisión por parte de individuos asintomáticos está desempeñando un papel más importante en la propagación del virus de lo que se entendía anteriormente”, señaló Trump.
Para la Organización Mundial de la Salud la preocupación es que la personas intenten conseguir las mascarillas médicas lo que dejaría sin recurso al personal de salud que atienden a los pacientes.
“Se debe dar prioridad al uso de mascarillas por parte de trabajadores sanitarios, que están en la línea de frente” para combatir la pandemia, subrayó al respecto el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en respuesta al creciente uso de este material de protección.
Por su parte, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) actualizó su guía de recomendaciones. En ella ahora indica que todos deben “cubrirse la boca y la nariz con una mascarilla casera de tela al estar rodeados de personas”.
“Todos deberían usar una mascarilla casera de tela cuando salen de sus casas, por ejemplo, para ir a la tienda de comestibles o para buscar otros productos necesarios”.
Sin embargo advirtieron que estos productos no se deberían ser usados por niños menores de 2 años ni en personas con problemas respiratorios o que estén inconscientes, incapacitadas o no sean capaces de quitárselas sin ayuda.
Los CDC fueron claros al pedir que no se use una mascarilla destinada a los trabajadores de la salud. Al mismo tiempo de incidir en la impotancia de la distacia social de al menos 6 pies.
“La mascarilla casera de tela no reemplaza las medidas de distanciamiento social”.
Hospital Wake Forest prueba mascarillas
En una reciente investigación, médicos y científicos del hospital Wake Forest Baptist Health de Carolina del Norte descubrieron que las mejores máscaras caseras para la protección contra el coronavirus COVID-19 son aquellas fabricadas con dos capas de “algodón de acolchado” de alta calidad y peso pesado con un conteo de hilos de 180 o más, así como aquellos con tejido especialmente apretado e hilo más grueso, como batiks.
El hospital indicó que las máscaras caseras pueden desempeñar un papel importante en la lucha contra la pandemia, pero el tipo de tejido utilizado es clave para su efectividad.
Los investigadores médicos utilizaron pruebas rigurosas, conocidas como filtración de partículas, para evaluar 13 diseños diferentes de aproximadamente 400 máscaras hechas por voluntarios de la comunidad.
El objetivo era descubrir qué tipo de máscara eliminaba mejor las partículas de 0,3 a 1,0 micras de diámetro, el tamaño de muchos virus y bacterias, en comparación con las máscaras quirúrgicas estándar y los respiradores N95.
“Vimos la posibilidad de que podríamos enfrentar una escasez de máscaras quirúrgicas en el hospital y queríamos investigar la posibilidad de usar máscaras de tela como una alternativa siempre que funcionaran y brindaran una buena protección para nuestros médicos, enfermeras y pacientes”, dijo el doctor Scott Segal, presidente de anestesiología en Wake Forest Baptist, quien concibió la idea.
Las más efectivas
El equipo de prueba descubrió que la efectividad de las máscaras variaba ampliamente. Las mejores máscaras caseras lograron un 79% de filtración en comparación con las máscaras quirúrgicas (62% a 65%) y las máscaras N95 (97%). Pero otras máscaras caseras probadas tuvieron un rendimiento significativamente peor, a veces demostrando tan solo un 1% de filtración, dijo Segal.
El diseño de mejor rendimiento se construyó con dos capas de “algodón de acolchado” de alta calidad y peso pesado con un conteo de hilos de 180 o más, y aquellos con tejido especialmente apretado e hilo más grueso, como batiks. Una máscara de doble capa con una simple capa externa de algodón y una capa interna de franela también funcionó bien, dijo.
Aquellas de menor protección son las que contienen una capa o diseños de doble capa de algodón liviano de menor calidad.
“Tan importante como esta información es para los hospitales, también es importante para las personas que desean hacer máscaras para su propio uso”, dijo Segal. “No queremos que la gente piense que cualquier pieza de tela es lo suficientemente buena y tiene una falsa sensación de seguridad”.